Dios dice en el versículo 31 de Sura Al-A'raf: "Hijos de Adán, llevad vuestro adorno a todo lugar de oración".
En este versículo, Dios nos dice que usemos nuestras mejores ropas y nuestros mejores perfumes cuando lo adoremos.
El uso de perfumes es parte de la Sirah del Santo Profeta (bpd) y de Ahl-ul-Bayt (p). El dinero que el Santo Profeta (bpd) gastó en perfumes fue mayor que la cantidad que gastó en comida.
Prestar atención a mantener la apariencia limpia y ordenada atrae la misericordia de Dios, mientras que Su misericordia no se siente atraída por un hogar desordenado e impuro.
Una vez hubo una pausa para la revelación del Corán. La gente le preguntó al Santo Profeta (bpd) por qué era así y el Profeta (bpd) respondió que no era una sorpresa ya que la gente no podía cortarse las uñas, usar perfumes y mantener su apariencia limpia y ordenada.
La limpieza y la buena apariencia tienen efectos mentales positivos en los demás y en uno mismo. El que mantiene su apariencia limpia y ordenada, está de mejor humor que el que no lo hace.
El Islam quiere que se salvaguarde la dignidad de los creyentes, pero no observar la limpieza y tener una apariencia desaliñada hace que los demás lo miren con desprecio.
Es importante señalar que ser limpio y ordenado no niega vivir una vida sencilla, no se pretende tomar actitudes extremas que lleven al derroche, por lo que es diferente a querer perseguir deseos excesivamente mundanos.
iqna.ir/en/news/3480994